lunes, agosto 27, 2007

¿Se puede?


Cuando vemos ficción aceptamos convenciones sin cuestionarlas. Pero, por lo menos una de ellas nunca deja de extrañarme. Es la posibilidad de cualquier persona de entrar en la casa de otro sin llave, sin avisar, sin golpear, sin nada. En general se trata de algún conocido del dueño de casa (si no caemos en el género de terror) , que simplemente empuja la puerta y entra sorprendiendo al dueño: en la cama engañándolo/a con otro/a, colgando de una soga con una notita, en medio de alguna actividad vergonzante y secreta.

Si van a caer de sorpresa, avisen. Hagan mucho ruido o por lo menos pregunten: ¿Se puede?

16 comentarios:

Gioconda dijo...

Por eso la puerta de entrada de mi casa tiene 2 cerraduras.
Y por las dudas le agregué un llamador de ángeles de esos bien ruidosos :P

Nadie me agarrará desprevenida :P

Besos

Chiara Boston dijo...

Sin ánimo de recordar sinsabores, sabés que en nuestro Buenos Aires querido, el q entren sin permiso es una posibilidad siempre presente.

Alicia R. dijo...

Gioconda, muy bien hecho :-)

Laura, por eso digo. Siempre entran la novia del chico, un amigo con una bolsa de donnuts y cosas así. Nunca un vendedor ambulante, alguien que pide limosna, unos ladrones, un violador y asesino serial. Es ficción ...Un beso.

Miroslav Panciutti dijo...

Me da que cada vez menos la ficción recurre a esas entradas sorpresivas; será que ya no nos parece tan normal que alguien llegue a una casa y abra la puerta directamente (entre otras razones, proque tiene echada la llave). Imagino que antes era más normal que las puertas estuvieran abiertas. Me llama la atención que BsAs sea "una posibilidad siempre presente". Por estos lares, lo más que me pueden sorprender es tocando el interfono (cuatro plantas más abajo y con tres puertas intermedias) alguien para "contarme un mensaje muy importante para mi vida" (mormones o evangelistas) o gente que se equivoca. Es rarísimo que un amigo llegue sin avisar; a veces lo echo de menos. Un beso.

Alicia R. dijo...

Miroslav, lamentablemente la posibilidad siempre presente a la que se refiere Laura es la de que entren para robarte y otros :-(.Más específicamente a la ocasión en que nos asaltaron el año pasado http://aliciarba.blogspot.com/2006/12/entre-chicas-de-20-y-para-las-de-40.html Los amigos avisan antes y si no se pueden quedar afuera por todas las medidas de seguridad que tienen las casas.

Alicia R. dijo...

No consigo dejar el link. Es el post del 9/12/06. Besos.

Miroslav Panciutti dijo...

Ya he leído el post en el que cuentas vuestra experiencia. Terrible, ciertamente; me ha impresionado imaginaros en esa situación, la angustia. Confío en que pasados ya varios meses apenas queden cicatrices, que tu hija mayor haya logrado desembarazarse de lastres. Obviamente, lo peor no es lo que se te llevan, ni siquiera el dramático tiempo en que te hacen sufrir; lo peor es lo que te dejan, el daño que te meten dentro, especialmente a los chicos jóvenes. Pues eso, que ojalá que tan mal trago esté casi superado y que muchísimos ánimos que espero que estén de más a estas alturas.

Por supuesto, no entendí la referencia de Laura. Habré de ponerme al día con tu blog :) Claro que, sin conocer los antecedentes, se hacía difícil pensar en asaltantes en el contexto de tu post. Un beso.

Alicia R. dijo...

Miroslav, claro en el post hacía referencia a las sitcoms.
Con respecto al asalto, mis hijas se repusieron rápidamente. Mi marido y yo pasamos un 1º mes muy angustiados, pero después volvimos a ser "como antes". Ahora lo único que me pasa es que si veo a alguien corriendo por la calle sin que esté obviamente entrenándose, me produce una descarga de adrenalina. Un beso.

andy dijo...

Demasiado ridículas esas situaciones,tan predecibles que cuando pasa algo raro, ya esperamos que entre alguien o no?

Ana dijo...

Me sorprende especialmente en las seriales y películas estadounidenses, siendo que tienen grandes problemas de seguridad, y hacen referencia a ellos en otros ámbitos, luego se retratan a sí mismos siempre con la puerta abierta, algo no me cierra. Cariños.

Hurricane dijo...

Otra costumbre que vuelcan en las películas, pero que no creo que tengan en realidad, es de jamas ponerle traba al auto cuando se bajan.
Y una también se observa y que tal vez sea así y el ignorante soy yo, es que en los bares no piden la cuenta. Arrojan displicentemente un par de billetes y se van.
Saludos

Alicia R. dijo...

Andy,y...sí. Besos.

Ana, supongo que es una convención del género.

Hurricane, ni traba, ni alarma, ni trabavolante, ni localizador satelital. Los dos últimos son porque desde que me robaron un auto quedé algo paranoica ;-)

La otra parte de mí dijo...

en las telenovelas o películas siempre resuelven los temas de conflicto así...pero me quedé pensando...porqué utilizarán este medio?falta de imaginación?
que pasa con la intimidad de las personas,con los miedos?hay una tendencia a meternos en la vida,el pensamiento,las acciones de los demás?qué se oculta más allá?es claro el mensaje en las ficciones?cuál es ese metamensaje?me dejaste pensando...

Alicia R. dijo...

LOPDM, me imagino que es una forma fácil de resolver situaciones. También se puede pensar más allá, como sugerís. Un beso.

Pani dijo...

Saludos.
El exponente más claro es FRIENDS, entran y salen a su antojo en las dos casas.
En cambio a la de Ross hay que llamar.
¿Por qué todas las casas tienen dos escaleras hacía el segundo piso? ¿Y por qué una da siempre al salón y otra a la cocina, que está al lado del salón?

Alicia R. dijo...

Pani, tenés razón con lo de Friends. Se siguen sumando los interrogantes :-) Gracias por tu visita.