jueves, enero 11, 2007

¡Lo que hay que escuchar!


Recorriendo un foro llamado Infertilidad en la Argentina, encontré que una de las participantes propone contar Esas frases que todas escuchamos (cuando la cigueña se demora). Frases que son muy graciosas cuando no es una las que las tiene que escuchar. En ese momento , si pudieras estrangularías al que te las dice. Una de ellas es tan divertida que no pude resistir la tentación de reproducirla en el blog. La protagonista es una mamá soltera que tuvo mellizos con un donante de un banco de semen. Y cuenta lo siguiente:

¡Ah! tengo una mas para agregar..... cuando fui al registro civil; a anotar los nenes; les dije que sólo llevarían el apellido mío. La administrativa (igual a la de Gasalla); me dijo que debía "concurrir a la Asesoría de menores para iniciar las acciones para procurar el reconocimiento de mis hijos por el presunto padre", y le dije; señora; es por voluntad; no tengo idea de quién es ..... Se puso pálida y me dijo "¡¡¡pero con mas razón querida!!! Hay que encontrarlo y que se haga cargo" - ¡¡¡Pero señora, yo no quiero que se haga cargo!!!! Es un tratamiento bla bla bla (y le conté todo) pero no se quedo convencida y me dijo que de todos modos iba a hacer la comunicación al Ministerio Público de Menores... jajajajja a veces me siento medio extraterrestre!

(Hubiera querido encontrar un video con Antonio Gassalla interpretando a su personaje de la empleada pública, pero no tuve suerte. Van a tener que conformarse con la foto :-)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuántas generaciones tendrán que pasar para que, de una vez por todas, las tan pregonadas igualdad entre sexos y libertad sexual sean una realidad.

Un saludo

Anónimo dijo...

En cierta manera me enternece la preocupación de la empleada pública. Es bruta, pero al menos se preocupa. Y a la madre soltera por opción todavía le quedan varias situaciones absurdas por las que pasar.

Besos

Alicia R. dijo...

Tanhäuser, creo que por ahora es un objetivo que nos excede.

Lurdena, creo que eso es lo que me resultó tan gracioso. Es un humor por el absurdo, porque si la empleada del Registro Civil la hubiera maltratado por simple prejuicio o por pocas ganas de trabajar, sólo era un episodio desagradable. Pero lo que contrasta es su afán de ayudar con rigidez mental. A mñi también me enternece en cierta manera.

Anónimo dijo...

Pues no os quiero ni contar cuando la que tiene que escuchar tonterías es la hija de la madre soltera. La gente no sabe qué pensar, qué decir, y por lo general hacen lo más adecuado, que es olvidarse del tema. ¡Ay! ¡Cuántos patrones hay que romper aún!

Alicia R. dijo...

Mrs Vane: sí, quizás lo más adecuado sea callar.