Propongo la creación de la L.M.O.N.H.P.C.C.C.S.C.(II)

Solo transcurrieron un par de días de la creación de la Liga y la reiteración de estas situaciones refuerza mi convicción sobre la necesidad de esta cruzada.

Almuerzo. Sirvo un pollo al horno con papas. Mi hija menor pregunta:

- ¿Qué es esta parte negra?
- Pollo.

- Pero los pollos no tienen cosas negras.

- Este sí. Es un pollo multicolor.

- ¿Por qué?

- Porque sí. (No me importa que Piaget se retuerza en su tumba. Seguro que no le daba de comer a sus hijos)

- Pero, ¿por qué porque sí?

- Porque así lo quiso Dios (en tono sarcástico)

- Pero, ¿no era que no eras religiosa?

- Cambié de idea. (Lo necesito si tengo que seguir sosteniendo estos diálogos muchos años más)

Propongo la creación de la L.M.O.N.H.P.C.C.C.S.C.

Ya que El Canilla me proporcionó una contra religión ya inventada para ahuyentar a los evangelistas, quiero dirigir mis esfuerzos a la creación de la L.M.O.N.H.P.C.C.C.S.C.

Creo que la sigla explica todo, así que no es necesario menospreciar la inteligencia de mis lectores. Seguramente todos ya se dieron cuenta de que trata de la "Liga de Madres que Odiamos que Nuestros Hijos nos Pongan Cara de Culo Cuando les Servimos la Comida".

La cruzada de la Liga es concientizar a la población en general y a nuestros hijos en particular acerca de los siguientes puntos:

• Detestamos preguntarnos 14 veces por semana: "¿Y ahora, qué les hago de comer"?


• Nos irrita profundamente que no haya casi ninguna comida que les guste a todos (excepto la pizza, pero si la hacemos más de tres veces por semana pasa a la categoría non grata)


• Nos deprime que cuando les pedimos una idea sobre qué hacer respondan alguna vaguedad como "algo rico", o pidan algo tan complicado que jamás perderíamos tiempo en eso, o o algo que para lo cual nos falta un ingrediente (o dos, o tres...)


• Y sobre todo ODIAMOS que cuando por fin pudimos poner (otra vez) algo sobre la mesa pongan cara de culo y nos digan:

¡Sabés que eso no me gusta! / Ya comí lo mismo al mediodía o ayer (¿Me pueden conseguir una copia de la ley que declara un crimen repetir una comida?) /¡Puaj! eso no lo como / ¿Cuántos tengo que comer para comer el postre?

Basta de tantas exigencias. O comen lo que sea con cara de nada, o se cocinan ellos.

Gracias MM, que lee y nunca comenta. La charla de concientización que tuvimos sobre el tema nos señaló la necesidad de emprender esta cruzada reinvindicatoria.

Hasta la victoria.

Aquí hay algo que no entendieron

Realmente me molestan las pacientes que vienen en esta época del año, diciendo:

- Vengo a hacerme el control ahora, así me voy tranquila de vacaciones.

Y me molestan porque no se dan cuenta de que lo que dicen es una soberana estupidez.

Con esa frase están asumiendo que el objetivo de hacer los controles en salud es ver que está todo bien y quedarse tranquilas. Y no, no es eso.

El objetivo de hacer pruebas diagnósticas en personas aparentemente sanas, es descubir cuáles de ellas están desarollando enfermedades que se beneficiarían de un seguimiento o tratamiento más precoz, antes de que den síntomas. Con esto en mente, yo vengo dos semanas antes de irme a la playa para hacerme un control. Al momento de la consulta pueden darse dos situaciones:

1. No tengo nada.
2. Tengo algo.

Si no tengo nada, haber hecho o no el control hubiera sido lo mismo. Es verdad que luego de los estudios tenemos una certeza razonable de que estamos sanos, pero al margen de que lo sepamos o no, el hecho en sí no cambia. Otro aspecto a considerar es que para arribar a esa conclusión a veces es necesario repetir procedimientos o solicitar otros para aclarar algunos puntos. En resumen, mi idea para irme tranquila de vacaciones no es llegar con mi mamografía y que me digan que hay una zona dudosa y que va a haber que hacer tomas adicionales y una ecografía. Mucho más considerando que voy a tener que esperar a la vuelta para hacerlas y que es muy probable que la conclusión final sea: no tengo nada.

Si tengo algo, salvo excepciones (ahora no se me ocurre ninguna, pero voy a seguir pensando...) enterarme ahora o el mes que viene no cambia nada. Sinceramente, me parece la peor idea del mundo enterarme la semana previa a mis vacaciones.

Siempre es mejor enterarse a la vuelta.

No intente hacer esto en su casa...

Sinceramente, me causan mucha gracia los cocineros profesionales que dicen que no entienden por qué la gente recurre a los productos pre-elaborarados y a los deliverys, cuando en diez minutos se puede preparar fácilmente algo rico y casero.

Yo, en diez minutos puedo colocar un DIU, puedo evaluar a una paciente y decidir si debe ser controlada (y cuándo), medicada u operada. Hasta puedo escribir un post, como ya habrán advertido ;-)

Pero, partir de ingredientes básicos y conseguir en diez minutos una comida completa...

Eso, se lo dejo a los profesionales.