miércoles, diciembre 17, 2008

Cuando fumar era cool...


Para el Ministerio de Salud de EE.UU., ningún tema puntual ha generado tanta preocupación en los últimos 40 años como el problema del cigarrillo. El debate sobre los riesgos y beneficios del tabaco se remonta desde que fue importado por primera vez a Europa. Durante el siglo XX su consumo aumentó alcanzando una gran masa de usuarios. En las décadas de los 30, 40 y 50 se fueron aumulando evidencias de los daños a la salud que provoca el cigarrillo.

Los epidemiólogos usaron trabajos estadísticos para confirmar la vinculación entre el tabaco y el cáncer de pulmón. El laboratorio y la anatomía patológica confirmaron la asociación con el cáncer de pulmón y con otras enfermedades graves como la bronquitis, el enfisema y los ataques cardíacos. Además estos datos fueron mostrando que el impresionante incremento del cáncer de pulmón durante el siglo XX, no se debía a la contaminación ambiental ni a las radiaciones, sino al cigarrillo. En 1957, el ministerio de salud pública de EE.UU. declaró oficialmente que existía evidencia de que el tabaquismo y el cáncer de pulmón guardaban una relación causal.

En 1961,varias instituciones prestigiosas tales como la American Cancer Society, la American Heart Association, la National Tuberculosis Association, y la American Public Health Association formaron una alianza para solicitar la creación de una comisión que se expediera sobre los efectos del tabaquismo en la salud. Durante el año siguiente dicha comisión quedó formada por diez expertos en diferentes áreas (medicina, cirugía, farmacología y estadística). Era condición necesaria que los integrantes no fueran fumadores.
Durante dos años revisaron más de 7000 artículos científicos con la ayuda de 150 consultores. El 11 de junio de 1964 dan a conocer el famoso reporte "Smoking and Health" (Tabaquismo y salud).

Smoking and Health marcó un punto de no retorno. A lo largo de más de 300 páginas, responsabiliza al tabaco por el aumento del 70% de la tasa de mortalidad de los fumadores con respecto a los no fumadores. El reporte estima que el fumador promedio tiene un riesgo de tener un cáncer de pulmón 9 a 10 veces mayor que si no fumara. Los grandes fumadores aumentaban su riesgo por lo menos 20 veces. Las posibilidades aumentaban a mayor duración del tabaquismo y disminuían si dejaban. El reporte también señala al cigarrillo como la principal causa de bronquitis crónica y plantea una correlación entre el tabaco y el enfisema y las enfermedades coronarias. Se da a conocer que fumar durante el embarazo reduce el peso del recién nacido.

El reporte tuvo gran impacto en la opinión pública y en las políticas oficiales. Una encuesta de Gallup muestra que para 1958, solo el 44% de los estadounidenses creía que fumar provocaba cáncer de pulmón. En 1968, el 78% pensaba así. Como resultado de Smoking and Health, comenzó una política para controlar a la industria tabacalera. A partir de 1965 los paquetes de cigarrillos debieron llevar una advertencia sobre los peligros de fumar. A partir de 1970, fue prohibida la publicidad.

Todo esto que cuento, fue por supuesto en EEUU. En la Argentina tardaron un poco en darse por enterados... algo así como más de 30 años. Pero finalmente llegó.

Antes de eso la industria tabacalera no tenía ninguna restricción para publicitar sus productos. ¡Y vaya si la aprovechaba! En realidad todo lo anterior era solo una introducción para que vean una muestra fascinante de la Universidad de Stanford sobre la publicidad de cigarrillos de la década del 20 al 50. Con el cambio de usos y costumbres nos resulta raro ver bebés recomendando la marca favorita de cigarrillos de sus madres, médicos ponderando las virtudes de fumar, novias yendo a su luna de miel sin olvidar su cartón de cigarrillos, exhortos a fumar para calmar la ansiedad, para "suavizar" la garganta... No se la pierdan.

9 comentarios:

Ana dijo...

Buenisima la muestra!!Quiza hayan oido que de este lado del Plata mejor ni traer la cajilla, porque esta prohibido fumar absolutamente en todo lugar público cerrado, y va en serio. A tal punto que para quienes no fumamos sentir olor a cigarrillo, se ha transformado en una rareza. En la pelicula Good Bye and Good NIght (de la epoca del macartismo) llama la atención ver a todos fumando en el estudio de televisión y en cámaras.

Alicia R. dijo...

Ana, sí, acá pasa lo mismo. Me pasó ir por la calle y que me llegue algo del humo de un cigarrillo y resultarme no solo insoportable, sino extraño. Un beso.

Miroslav Panciutti dijo...

Excelente la muestra. Había ya visto algunos de esos anuncios (incluso algunos videos) y me habían hecho mucha gracia. De todas formas, uno mismo no puede sino sorprenderse de cuánto han cambiado las cosas en los últimos treinta años; la naturalidad con que en mi infancia mis padres y los adultos fumaban a todas horas y en todos sitios. Y ahora ...

Por cierto, soy ex-fumador y con mucha frecuencia siento unas ganas tremendas de encenderme un cigarrito ...

Un beso y muchas gracias por pasarnos esa magnífica exposición.

Alicia R. dijo...

Miroslav, es increíble el cambio cultural que se vivió en esos años. En cuanto a tus ganas de encender uno más, no lo incluí en el post pero en "Smoking and Health" también se discuten los aspectos adictivos de la nicotina. Besos.

Hurricane dijo...

Mas cool que los avisos de LM de la década del '70 no recuerdo. Con aquellos dos modelos paseándose por el mundo.
LM marca su nivel
Saludos

Alicia R. dijo...

Hurricane, ¡es verdad! Eran "lo más"
Besos

Ana dijo...

Me mató el que dice que en lugar de comer un caramelo o dulce hay que fumar un pucho... y el del bebé es terrible!!!
Hija de un ahora -por-suerte-ex-fumador, jamás fumé ni lo haré...me casé con un no fumador y hasta papá odia el olor ahora...aunque admite a veces tentarse...
y sabés a las charlas que tuvo que ir para dejar?? y los medicamentos que le tuvo que dar la psiquiatra para contrarrestar esa adicción de añares??
increible!!!

bárbaro tu post.

Sandra Strikovsky (Strika) dijo...

También soy ex fumadora (acabo de cumplir 7 años sin fumar), y me he vuelto muy intolerante al tabaco por lo que agradezco las leyes que prohiben fumar en lugares públicos. Sin embargo, no me late para nada la discriminación contra los fumadores. Como bien dices, antes era "cool" fumar. Ahora, después de que la industria tabacalera nos metiera hasta por donde no el cigarro, los fumadores son volvieron los apestados de la sociedad.

Un beso

Alicia R. dijo...

Anita: bueno, lo de fumo para comer menos sigue siendo muy actual. Lo que pasa es que ya no es una estrategia válida de publicidad. Un beso.

Strika: tenés razón en que hay hábitos o lo que sea que son más censurados socialmente que otros y no tienen que ver con la "peligrosidad" del mismo. Otro ejemplo es la obesidad, con el agravante de que el obeso no perjudica a ningún tercero. Un beso.